El delegado de la SEMARNAT en Chiapas, Amado Ríos Valdez fue denunciado ante la PGR por presuntos actos de corrupción, lo que ha llevado a la quiebra de algunos proyectos de Unidades de Manejo para la conservación de la vida silvestre, conocidas como UMAS, en tanto este miércoles técnicos y productores cancelaron de manera simbólica las oficinas de la depedencia federal en Tuxtla Gutiérrez.
Manuel Anzaldo Meneses, Consejero suplente ante el Consejo Técnico Consultivo Nacional para la Conservación y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre (CONAVIS), sostuvo que han solicitado al órgano auditor interno de la delegación que se haga una auditoría de fondo y se sanciones a los responsables.
Sin embargo, por tratarse del delegado el implicado en los presuntos actos de corrupción piden el cese del funcionario federal hasta en tanto se concluya con la auditoría.
Además de hacer la demanda ante la PGR, dijo que acudirán al Congreso de la Unión y oficinas centrales de la secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca por tratarse de recursos públicos los que están de por medio.
Dijo que el delegado para tratar de encubrirse se adelantó desplegando una campaña donde denunció a productores de ser los responsables de la corrupción, por eso piden la auditoría para que se esclarezca quién es el responsable.
Anzaldo Meneses dijo que se había logrado que en Chiapas se ejercieran 51 millones de pesos para el fomento a UMAS, pero en 2014 con este delegado solamente bajaron a los productores diez millones de pesos, por lo que se ha dejado sin atención a varios proyectos de cría de venado, jabalíes, iguana, cocodrilo, tortugas, faisanes y serpientes.
En tanto, México importa alrededor de 200 mil iguanas por año de El Salvador y Honduras, 150 mil venados de los Estados Unidos y Nueva Zelanda, 350 mil cocodrilos de Colombia, 70 mil serpientes pitones de Africa, 70 mil tarantulas y 70 mil escorpiones, para la comercialización y el mercado de mascotas.
Todo esto pudiera estarse produciendo en el país y en Chiapas, pero por tratarse de procesos complicados y no contar con escuelas que enseñen a la producción de especies de vida silvestre, no es fácil y no se puede exigir que a la primera salgan redituables los proyectos, y evidentemente hay un porcentaje de fracasos. Pero si no hay inversión, se pierde todo, subrayó.
En tanto, en la manifestación de los técnicos y productores, se dijo que al delegado poco le importa la vida silvestre y la vida forestal, porque está visto que para este funcionario el negocio está en autorizar estudios de manejo de impacto ambiental para las mineras. / Cosme Vázquez /ASICh
