• Las bebidas azucaradas aportar una grandes cantidades de calorías vacías al organismo y pueden producir importantes consecuencias en la salud como la obesidad, la diabetes e incluso perjuicios en las piezas dentales
Una gran cantidad de personas en nuestro país cursa con sobrepeso u obesidad, producto de la ingesta sin control de alimentos y bebidas ricos en azúcar u otros edulcorantes naturales u artificiales; y que se encuentra directamente asociado al incremento del riesgo de padecer diabetes.
En este sentido, la doctora María Griselda Rueda Castañeda, titular del Módulo DiabetIMSS de la Unidad Médica Familiar (UMF) No. 13 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tuxtla Gutiérrez señaló que existe evidencia de que las estas bebidas ricas en azúcar, como los refrescos embotellados, algunos tipos de bebidas alcohólicas y las conocidas como “bebidas deportivas”, no producen saciedad, por lo que su alto consumo no disminuye la ingesta de otros alimentos y, además, se incorporan calorías vacías que no aportan nutrientes.
Por el contrario su consumo excesivo puede originar diversos males asociales al síndrome metabólico, y comentó que estas bebidas originalmente se consumían en situaciones recreativas y de forma poco habitual; sin embargo, con los cambios en las costumbres y el incremento de la publicidad pasaron a formar parte de la mesa diaria de las familias y se ingieren a libre demanda, sin restricciones.
Rueda Castañeda advirtió que entre los múltiples efectos negativos de este tipo de líquidos se encuentran el rápido y visible aumento de peso de quien las consume con regularidad; provocan también la alteración del metabolismo de las grasas, concentrándose en la zona abdominal, incrementado el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y sufrir infarto agudo al miocarido.
El organismo desarrolla lo que se denomina resistencia a la insulina, que aparece cuando nuestro cuerpo no es capaz de fabricar la cantidad necesaria de esa hormona para metabolizar todo el azúcar que ingerimos. Esto provoca que aumente el riesgo de padecer diabetes mellitus tipo 2.
La especialista del IMSS Chiapas exhortó a evitar a toda costa la ingesta de bebidas endulzadas, sobre todo en niños pequeños o para quienes ya padecen alguna complicación de la diabetes, haciendo especial énfasis en las que contienen dulcificantes artificiales.
La especialista del IMSS recomendó optar siempre por consumir agua pura, jugos, bebidas naturales e infusiones, así como néctares y extractos de frutas, evitando agregarles dulcificantes; estas bebidas son una alternativa mucho más saludable para mitigar la sed y mantener el cuerpo hidratado.
