*.- La condición para dejarlo libre, fue de no volver a talar árboles en zona presuntamente “oaxaqueña”.
CINTALAPA, CHIAPAS.- Bajo la condición de no volver a talar árboles en tierras supuestamente oaxaqueñas, el chiapaneco Ángel López Gómez comisariado ejidal de la comunidad chiapaneca “Rodulfo Figueroa” fue liberado la noche de este viernes.
Y es que después de casi diez días de que fuera privado de su libertad por gentes originaras de San Miguel Chimalapa, la noche de este viernes, junto con otras personas más, el chiapaneco fue liberado sano y salvo, según se informó.
De acuerdo con los datos obtenidos y sin llegar a acuerdos concretos tras una reunión con autoridades del gobierno estatal, comuneros oaxaqueños dejaron en libertad este viernes a cinco personas que mantenían retenidas en San Antonio.
Los comuneros oaxaqueños aclararon que al no encontrar capacidad entre los funcionarios para atender el tema de la invasión en sus tierras y de la tala de árboles en la zona por parte de ejidatarios chiapanecos, decidieron por voluntad propia liberar a los retenidos, toda vez que las autoridades de ambos estados mostraron total desinterés en ese tema.
Se informó que los liberados junto con López Gómez fueron los funcionarios, Víctor Hugo Alejo Torres, consejero jurídico del gobierno del estado, Juan Arturo López Ramos, coordinador técnico de la Secretaría General de Gobierno, y el subdelegado de la Profepa, Héctor Miranda, también el helicóptero oficial del gobierno del estado de Oaxaca y los pilotos Emilio Olmos Gómez y José Álvaro Mora Morales.
Hay que recordar que el sábado pasado, el comandante Esaú Trujillo Gómez y el fiscal adscrito en la Vice fiscalía de Tehuantepec, Juan Carlos García Salud, acudieron al poblado San Antonio a tratar de negociar la liberación del ejidatario chiapaneco, pero también fueron retenidos y hasta la noche de este viernes recuperaron su libertad.
Juan Arturo López Ramos dijo que se acordó establecer mesas de diálogo de campesino a campesino, entre comuneros chimalapas y ejidatarios chiapanecos para evitar más invasiones en la zona del conflicto, así como la devastación de la naturaleza, ya que se dice que son 150 mil hectáreas entre selva y bosque las que se disputan los habitantes de ambos estados. / MARCOS RAMOS
