*.- De milagro solo se reportaron daños materiales.
JIQUIPILAS, CHIAPAS.- La tarde de este viernes se registró un fuerte accidente automovilístico a la altura del kilómetro 27 sobre la vía de cuota Coita-Arriaga, donde el exceso de velocidad, la falta de precaución y experiencia, pudieron haber sido los factores de los hechos.
Cerca de las trece horas, al personal de auxilio vial de la carretera de peaje les avisaron del percance, por lo que al aproximarse al punto encontraron hecha pedazos a mitad de la cinta asfáltica una camioneta marca Nissan tipo estaquitas color roja con placas de circulación (CW06019) y sobre la cuneta al chofer quien dijo llamarse Luis García Torres de 19 años de edad, originario y vecino de la colonia Terán en Tuxtla Gutiérrez, quien solo tenía un fuerte susto y nada más.
Metros más adelante y sobre el mismo carril, estaba parado un tráiler color blanco marca International con placas del tractor (262ED5) del servicio público federal de carga México, con señas de que en la punta trasera izquierda, ahí se había impactado el novato chofer de la Nissan.
Al confirmarse que no habían lesionados, auxilio vial llamó a la policía federal para que se encargaran de lo sucedido, toda vez que habían daños en la cinta asfáltica que alguien tendría que pagar.
Al arribar los oficiales se entrevistaron con Víctor Andrés (chofer del tráiler) quien dijo que él se dirigía hasta la frontera del país, pero por ir muy cargado transitaba despacio sobre el acotamiento, cuando sintió un fuerte impacto por atrás y al ver su espejo, observó que un alocado chofer había chocado por alcance contra la segunda caja.
Cabe mencionar que la unidad más dañada es propiedad de Luis López Campos, originario del municipio de Mapastepec, dedicado a la venta de mariscos, y a la hora del percance, su trabajador se dirigía hacia la costa, quizá a cargar productos del mar, pero gracias a su prisa y falta de precaución, ya no llegó a su destino.
Los federales permitieron que la pesada unidad continuara su viaje ya que nada tuvo que ver en el accidente, mientras permitían que personal de grúas remolcara lo que había quedado de la estaquitas para trasladarla al corralón en Cintalapa donde permanecerá hasta que el dueño la valla a reclamar. / MARCOS RAMOS
