CINTALAPA DE FIGUEROA, CHIAPAS.- Para salvar sus vidas, un grupo de aproximadamente 61 personas entre hombres, mujeres y niños que vivían en un centro de población llamado “Nuevo San Andrés” enclavado en la zona noroeste del municipio cerca de donde se sitúa la reserva protegida “Los Ocotones”, se vinieron a refugiar a este valle, luego de que fueran expulsadas de ese lugar por otros habitantes de ese mismo lugar.
De acuerdo con los datos obtenidos, las más de sesenta gentes fueron desalojadas la noche del pasado miércoles por un grupo de tres familias apoyadas por habitantes oaxaqueños, las mismas que les dijeron que si no se iban ese momento del predio mencionado, violarían a las mujeres y a los niños, por lo que al temer que lo cumplieran, tomaron lo básico y salieron del lugar caminando entre la inmensidad de la noche con rumbo a este municipio.
Fue entonces que llegaron a este valle de Figueroa, y el ayuntamiento al saber la situación que vivían los albergó en el auditorio municipal mientras se conseguía una entrevista con el secretario general de gobierno (SGG) para saber qué hacer al respecto.
Se sabe que los desplazados dejaron sus casas, sus tierras, sus animales, y al ver lo difícil de la situación, ven casi imposible que puedan regresar y recuperarlas, por lo que piden a alguna instancia estatal los apoye, ya que aseguran tener escrituras con las que pueden acreditar la propiedad donde vivían y de donde fueron expulsados.
El alcalde Enrique Arreola Moguel dijo que mientras las cosas se calman, ellos como autoridad los apoyarán con alimentación, atención médica y otras necesidades básicas que tengan, ya que es lo menos que pueden hacer por ellos, toda vez que se ignora que fue lo que realmente pasó en ese lugar para que los hayan obligado a abandonar sus tierras. / MARCOS RAMOS
