Un grupo de promotores brigadistas comunitarios de la Cruzada Nacional Contra el Hambre se manifestaron en las calles de Tuxtla, para exigir el pago de su salario prometido, que les deben desde enero de este año, por lo que han pasado cinco meses en situación de hambre junto con sus familias.
Osmar Amador González Gómez dijo que es una ironía al programa de interés primordial del presidente Enrique Peña Nieto el que la SEDESOL no pague a este personal, que son mujeres y hombres que llevan las realidades marginales que viven las poblaciones, a efecto que sean atendidas para superar el hambre.
Acusó a la UNACH como responsable directo de no pagarles hasta estos momentos, porque a pesar de tratarse de un programa federal se les dijo que en esta institución de educación superior absorberían los salarios.
Refirió que una ocasión fue una comisión a la Universidad, por lo que al ver la presión les dijeron que ya estaban los pagos, pero en la realidad no les han cumplido, les han mentido desde hace unos 20 días.
Explicó que desde hace meses vienen metiendo oficios, dirigidos al secretario particular del Presidente de la República, a la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, así como al delegado de la SEDESOL en Chiapas, Eduardo Zenteno Núnez.
Precisó que la delegación de la dependencia federal no son los culpables de la falta del pago, porque todo eso se origina en Oficialía Mayor de oficinas centrales de la Sedesol, donde despacha el chiapaneco Emilio Zebadúa y no vela por sus paisanos.
Anotó que cada uno de los promotores brigadistas tiene a su cargo alrededor de diez comités comunitarios del programa, por lo que solo aquí en Tuxtla tienen a su cargo más de 520 comités.
La situación de la falta de pago no solo se dan con ellos que están en Tuxtla, sino también en el interior del estado, pero ellos decidieron manifestarse porque ya no aguantan más, pagan rentas, alimentación para sus familias y en la capital del estado la vida es cara.
En cuanto al programa Sin Hambre, reveló que hasta el año pasado se tenían buenas perspectivas, estaban aterrizando los beneficios, pero este año las cosas han cambiado no han aterrizado los proyectos para las zonas marginales. / Cosme Vázquez /ASICh
