Con la aplicación de medidas correctivas, como uso de plantillas y cuñas, además de rutinas específicas de ejercicio se logra corregir uno de los problemas ortopédicos más comunes: el pie plano, explicó el traumatólogo adscrito al Hospital General de Zona (HGZ) N°1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chiapas, Luis Fernando Arenas
Cruz.
Este padecimiento, dijo, es una deformidad de la extremidad, propiamente de tendones y ligamentos, que ocasiona rigidez y desbalance muscular, lo que provoca el apoyo de toda o casi toda la planta ante la carencia del arco natural.
Señaló que los pies planos se deben a que los tendones y ligamentos que sostienen las articulaciones están débiles. Se catalogan en congénito, traumático, inflamatorio y raquítico o postural. La clasificación determina el tratamiento a seguir.
En los lactantes y niños que comienzan a caminar, apuntó, el padecimiento es normal porque el arco aún no se ha desarrollado. Este se formará como parte del proceso de crecimiento de músculos, tendones, ligamentos y huesos del pie, que concluirá alrededor de los siete años de edad.
El especialista en Traumatología del Seguro Social destacó que los síntomas que definen este problema son dolor o molestia articular –principalmente en la rodilla– y cansancio al caminar. Hay pequeños que se tropiezan constantemente al correr, debido al choque de sus rodillas.
Arenas Cruz afirmó que es muy importante la inspección visual para detectar si el niño comienza a caminar en forma extraña, por ejemplo, apoyado sobre los cantos exteriores de los pies, o si tras una caminata manifiesta cansancio y dolor. Además, desgastan muy rápido los zapatos.
El tratamiento que se ofrece en el IMSS, puntualizó, incluye la programación de ejercicios para recuperar el balance muscular.
Luis Fernando Arenas Cruz señaló que no atender a tiempo y adecuadamente este problema, puede provocar alteraciones de la marcha, además de malas posturas, que se traducirán en afectaciones de la estructura músculo esquelética.
