Se realizó en las instalaciones del Congreso local y a través de plataformas electrónicas el Foro Híbrido: “Violencia Vicaria en Chiapas: análisis y contexto”, organizado por la Secretaría de Igualdad de Género, y diputadas y diputados de la LXVIII Legislatura. Al respecto, la secretaria María Mandiola afirmó de manera categórica que, en Chiapas, “las instituciones no vamos a ser cómplices de la violencia vicaria. Compartimos su sentir, sus causas, sus exigencias son nuestras”.
Desde España, la psicóloga clínica y especialista quien acuñó el término, Sonia Vaccaro, reconoció los aportes que en México se han hecho para enfrentar esta problemática, a los grupos de madres de México y Chiapas por su activismo, que permitió que el tema se debata en los Congresos locales y en el Senado. Afirmó que desde 2012 quedó atenta al relato de las mujeres víctimas de violencia de género, lo que les sucedía cuando planteaban el divorcio o se separaban.
“La mujer cree que con la separación pone fin a la violencia, pero si tiene hijas e hijos menores, es un factor de alta vulnerabilidad. El objetivo es la madre, los hijos no le interesan”, afirmó.
Dijo que la violencia vicaria tiene su primer cómplice en las instituciones de justicia, “se disocia la violencia contra la mujer de la peligrosidad de ese individuo sobre las niñas y niños, pensando que como es el padre, no les va a hacer daño”, sin embargo, un estudio realizado por la Universidad de Granada reveló que en 82% de los casos de violencia vicaria extrema, el asesino de las niñas y niños era el padre biológico.
“Siempre hemos encontrado en todos los casos, violencia de género previa, violencia que la mujer aguantó y toleró seguramente para proteger a las hijas e hijos. Eso el hombre violento lo sabe. Los utiliza como elemento de presión para ir contra la mujer. Un hombre violento jamás será buen padre, un padre es otra cosa”, lamentó.
Esfuerzos legislativos
En este sentido, Ana Francis López Bayghen Patiño, diputada de la CDMX, señaló que la violencia familiar hay que comprenderla como un asunto de estado y que nos concierne a todas las personas, “sabemos que a nivel nacional estamos en una alerta de género, a las mujeres nos matan por ser mujeres. Estamos en una circunstancia en la que todos tenemos que accionar conjuntamente, la perspectiva de género tiene que permear todas las iniciativas, las que tienen que ver con el agua, la movilidad, las que tienen que ver con todo, mucho más en función de la justicia”.
Reconoció que vale mucho la pena el esfuerzo que se hace desde muchos Congresos locales, desde el Senado, “la amenaza de quitarnos a nuestros hijos para violentarnos y que no nos salgamos del huacal, es una amenaza constante que hay que erradicar”.
Gabriela Martínez, diputada de San Luis Potosí, lamentó el desconocimiento de esta violencia en las instituciones, “es preocupante, falta mucho por sensibilizar, por socializar el tema, que nos quede claro a todas las instituciones jurisdiccionales, y al interior del Congreso. Es importante que esto lo veamos desde la perspectiva de la infancia. Poner en el centro a las infancias, niñas, niños y adolescentes”.
Por su parte, Micaela Giacobone Schwartz, impulsora de la Ley Nacional contra la Violencia Vicaria e integrante de “Vivir con amor”, Red de Apoyo para Mujeres Víctimas de Violencia Vicaria, relató su experiencia, e hizo un llamado a la sociedad a no volverse cómplice. Lamentó que miles de mujeres pasen años de sus vidas sin poder abrazar a sus hijas e hijos, “todas nos sentimos muertas en vida. La violencia vicaria es impulsada por el odio hacia la mujer, que es una violencia de género, y al igual que el feminicidio, debe ser legislada”.
Asimismo, Eileen Rodríguez, integrante del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria Capítulo Chiapas, narró su experiencia y habló sobre otros casos de mujeres que llevan meses y años sin ver a sus hijos, además agradeció a la Seigen y al Congreso local por abrirles las puertas y escucharlas.
Juanita González, diputada del Congreso de Nayarit, habló sobre la urgencia de legislar a nivel local. Dijo que la violencia vicaria es quizá la menos conocida, pero es la más peligrosa por el gran impacto que tiene, “no sólo en la mujer, sino en las niñas y niños que son víctimas, con infancias traumáticas, manipulados psicológicamente y que llegan a ejercer autolesiones o hasta suicidios”.
En el Foro, también participaron, ofreciendo su completo respaldo a las víctimas, María de los Ángeles Trejo, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de Chiapas, así como las diputadas Elizabeth Escobedo Morales, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género; Floralma Gómez Santíz, presidenta de la Comisión de Atención a la Mujer y a la Niñez; Karina Margarita del Río Zenteno, presidenta de la Comisión de Transparencia e Información Pública, y Yamil Melgar Bravo, presidente de la Junta de Coordinación Política.
Hasta ahora, en México, las entidades donde ya hubo reformas en la materia son Zacatecas, Estado de México, Hidalgo y Yucatán; mientras que Tabasco, Oaxaca, Puebla, Morelos y Jalisco han presentado una iniciativa para sancionar esta forma de violencia. En Chiapas, la iniciativa de reforma sobre violencia vicaria ya fue presentada a legisladoras y legisladores locales.
Por último, María Mandiola dijo que, “nos queda claro que trabajar unidas es la mejor manera para frenar la violencia machista, porque cuando las mujeres nos unimos, el patriarcado tiembla, y eso es lo que queremos, que los cimientos caducos de este sistema caigan. Lastimar a las mujeres a través de sus hijas e hijos es la forma más cruel e inhumana de violencia que existe. Fractura a las familias y a la sociedad. En la Seigen tienen a una aliada dispuesta a escucharlas y trabajar de su lado, para vivir con el derecho que merecemos todas a una vida libre de violencia”.
