Si presenta intestino irritado debe consultar a su médico familiar para que le brinde un tratamiento adecuado, ya que podría tratarse de una colitis originada, entre otras causas, por mala alimentación, consumo excesivo de alcohol, diferentes tipos de virus o por bacterias ingeridas.
La doctora Xóchilt Reyna Pérez, titular de los Servicios de Prevención y Promoción de la Salud para los Trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (SPPSTIMSS), señaló que la colitis es un padecimiento gastrointestinal consistente en la inflamación del colon, que se extiende al intestino grueso.
Indicó que dentro de los síntomas se encuentra el estómago distendido, retención de gases, dolor abdominal, náuseas, cólicos, estreñimiento o diarrea y vómitos, que de no ser atendidos oportunamente provocarían una hemorragia, así como deshidratación, mala digestión y detrimento nutricional.
Informó que colon y el intestino grueso son los que más sufren con este padecimiento, debido a los cambios y reacciones del cuerpo por presión emocional o estrés, produciendo trastornos en el buen funcionamiento de estos órganos.
Resaltó que especialistas en Medicina Familiar, Nutrición y Psicología ayudan a llevar mejor control de este padecimiento, así como determinar factores que la provocan, a través de exploración abdominal.
Si los factores arrojan problemas nutricionales, se le indicarán cambios en su alimentación, evitar comida chatarra, picante e irritante, dieta rica en fibra, hidratación adecuada y constante; en caso de tratarse de agentes infecciosos, virales o bacteriológicos, se le recetarán medicamentos adecuados.
En caso de presentarse por trastornos ambientales o emocionales, se debe cambiar el estilo de vida, llevar psicoterapia o actividades terapéuticas para el mejor manejo del estrés; y en casos más delicados, se enviará al especialista en Gastroenterología.
